lunes, 16 de abril de 2012

No tiene título (Carlos Edmundo de Ory)

Con Carlos Edmundo de Ory. 1994.

NO TIENE TÍTULO
(POR CARLOS EDMUNDO DE ORY)

Cuando yo era niño un hada me regaló una catedral
Cuando yo era niño el color azul se puso de pie delante de mí
Cuando yo era niño llamaba de usted a los peces
Cuando yo era niño vi la sangre del mármol
y vi la mano de Dios tirada en un baratillo
y vi el arpa de David en el despacho de un banquero
vi también por primera vez la lluvia un lunes
Cuando yo era niño me metieron en una familia
pero en realidad yo era el jefe de los violines
Empecé a mentir empecé a orinar aguardiente
No sabía dónde guardar mis cosas
coleccionaba polvo
Un hombre extraordinario llegó a mi cama
y hablándome al oído me dijo:
"Yo soy el marido de la luna "
Siete veces me puse enfermo
Fue siempre a causa de siete sorpresas
No me está permitido enumerarlas salvo dos
La que tuve cuando vi las pestañas de mi ombligo
y la otra que me marcó para toda la vida
Era un tren que llevaba calles a las ciudades
Una vez me dio un beso un lobo
Cuando yo era niño me rompí
Cuando yo era niño mi maestro era un niño
el cual se clavó un clavo en la cabeza
Perdió el habla
De él recibía mensajes por escrito
Todo lo que sé hoy día
se lo debo al niño que me lo enseñó
principalmente el sánscrito
La primera palabra que aprendí a escribir
fue la palabra peine
Nadie sabe que es un verbo
Cuando era niño me escapé del colegio
y me fui a China
Hay muchas cosas que no puedo decir a nadie
casi todas se refieren a las matemáticas
Sobre la madera de los pianos no hay nada que yo no sepa
Un sacerdote me dijo lo que significa fumar
Sé que los sepultureros venden bufandas a los muertos
No he visto cosa más bella que la sombra del pavo real
Durante una hora sufrí el peor de los castigos
fue cuando me dieron de baja de niño en un convento
ya que molesté a las monjas con preguntas de teólogo
Siempre me interesaron las rodillas
En el frío del amanecer está la razón de todo
Cuando yo era niño traje una roca a casa
Coleccionaba saliva
Una vez entré con un caballo en una taberna
Me hicieron subdirector de los jugadores de bolindres
Cuando leí que en la Biblia se hablaba de Postismo
lo primero que hice fue comprarme un bañador
El niño que era mi maestro murió en el frente
Coleccionaba termómetros
Se supo en el gobierno que yo mentía
Planché una paloma para saber lo que es el pecado
y vi bajar de un barco lo que diré
(salvo lo que no me está permitido decir a nadie)
Vi bajar a un abuelo que estornudaba mucho
Vi bajar al inventor de los billares de bolsillo
arruinado llorando
y vi bajar a un bailarín famoso que se me acercó diciéndome
-Sabes rosa mía que he venido hasta aquí
para tocar el corazón de los limpiabotas.

5 comentarios:

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  5. Hay quien pasa por la vida sin pararse a pensar un segundo qué es la vida ...
    Quizás hoy, más que nunca, gracias a eso que se ha dado en llamar las nuevas tecnologías, los videojuegos, los grades medios como la TV; el mundo se encuentra inmerso en una epidemia de mediocridad donde reinan la evasión más pueril, la inmediatez y la falta de serenidad de espíritu.
    Y es que el alma al igual que al cuerpo también hay que darle su propio alimento, y ese alimento que se encuentra incrustado en la belleza de la naturaleza, a veces tan inaccesible; en la música y en el alma de los poetas; y en tantos otros lugares parece no interesarle al sistema dominante ...
    No le debe resultar rentable.

    Y yo me pregunto donde estaríamos si no hubieran existido personas como
    Carlos Edmundo de Ori,

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